Silvia, una mujer de 80 años, se escapa de casa en busca del silencio. Su nieto Antonio, de seis años, es el único que sabe su paradero. Su abuela ha ido sola a una capilla en medio del campo. Allí se sienta a meditar esperando su muerte. Paula, la hija, angustiada por el comportamiento irracional de su madre, se niega a dejarla sola y hará todo lo posible para que vuelva a casa.